Los profesionales del centro de salud Guadalajara-Sur, dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, han desarrollado una actividad de promoción de la salud con el objetivo de concienciar a la población sobre la importancia de mantener, también en estas fechas, hábitos nutricionales saludables para evitar el aumento de peso y los riesgos y problemas para nuestra salud que traen consigo los excesos de estos días.

Para ello, el personal viene realizando en los últimos años una actividad de promoción de la salud y prevención de la enfermedad, y este año han potenciado la iniciativa ofreciendo información a los usuarios del centro de manera directa, mediante paneles informativos o repartiendo folletos con consejos para tener una Navidad ligera y saludable, así como la sugerencia de recetas con  menos calorías y grasas que las comidas tradicionales navideñas.

Con la colaboración de los alumnos de la Escuela Universitaria de Enfermería, se han distribuido alrededor de 700 folletos y más de 200 recetas entre los usuarios y se les ha informado sobre cómo enfrentarse a estos días en los que las comidas copiosas, junto a un mayor sedentarismo y el abandono o relajación respecto a hábitos saludables pueden traer consigo un aumento de peso que se estima que va desde los dos a los cinco kilos.

Además, se ha insistido en la importancia del ejercicio físico y en no abandonar la práctica deportiva en estos días, y también se han ofrecido trucos para evitar tentaciones.

La propuesta ha resultado, señalan sus organizadores, “muy gratificante y muy bien acogida” por quienes han pasado estos días por el centro de salud, que han mostrado un gran interés y han solicitado información sobre cómo confeccionar un menú navideño saludable.

“Las personas han estado muy receptivas, muchas se muestran cansadas del consumo excesivo de estos días y de sentirse mal posteriormente, porque al comer más de la cuenta se sienten culpables, y eso afecta a su salud física pero también a su salud mental”, explican.

Por este motivo, las recomendaciones se basan en disfrutar de los banquetes pero “aplicando la moderación, y en que algunas comidas se pueden sustituir por diferentes tipos de ensaladas, ensaladas con marisco o recetas con pescados, y los dulces se pueden reducir o sustituir por  ensaladas de frutas”.

Asimismo, los folletos incluyen enlaces con actividades para realizar estos días. Según los profesionales hay más concienciación, “se observa un cambio de tendencia y con el tiempo hay mayor moderación, de manera que hay menor ganancia de peso en Navidad respecto a lo que sucedía antes”. Con todo, es importante insistir en estas recomendaciones, especialmente en el caso de los niños, dado el progresivo aumento del índice de obesidad infantil.

Los excesos de comida y alcohol constituyen un riesgo para la salud. Una sola comida de Navidad puede contener entre 2.000 y 2.500 calorías, esto es, el equivalente a un día completo de dieta normal. Asimismo, conviene recordar que la tasa de obesidad ha ido aumentando en los últimos años y en 2017 uno de cada seis españoles era obeso, según el informe de la Comisión Europea sobre el Estado de Salud en España.

Propuestas como la desarrollada en el Gu-Sur se enmarcan en la apuesta de la Consejería de Sanidad por la promoción de la salud y el desarrollo de actividades dirigidas a implicar a la ciudadanía en la prevención de las enfermedades.

Recomendaciones en estas fechas

Conviene planificar minuciosamente los menús dando prioridad a los platos ligeros, confeccionando una lista de compra con alimentos naturales y calculando bien las cantidades para no estar comiendo “sobras” los días posteriores. Se recomienda seleccionar frutas y verduras de temporada y alimentos bajos en grasa como pescados, pavo y pollo. Además, es una buena ocasión para cocinar recetas divertidas con los más pequeños.

Más conversaciones y menos turrones: es importante planificar actividades con los niños y organizar veladas en las que la conversación y los juegos de mesa sustituyan una buena parte de los dulces navideños y bebidas. No se debe dejar en la mesa la bandeja de los dulces, pues en sobremesas prolongadas tiende a comerse por inercia. Asimismo, conviene reservar el turrón y los dulces para los días de fiesta y no deben comprarse con mucha antelación.

Se recomienda mantener o incrementar la actividad, aprovechando para visitar exposiciones y acudir a actos culturales, y si se tiene el hábito de practicar deporte no se debe interrumpir durante las fiestas. También es el mejor momento para actuar ante una vida sedentaria: caminar cada día al menos 30 minutos a paso ligero es un ejercicio muy efectivo y accesible.

Pasadas las navidades, hay que optar por una nutrición variada y saludable para perder los kilos ganados, con cinco ingestas diarias que incluyan verduras, hortalizas, fruta, legumbre, carnes, pescados, pan o aceite de oliva. Hay que evitar, finalmente, las dietas extremas y los conocidos como “productos milagro” que llevan a un déficit nutricional y a un efecto rebote.