Una sonora traca ha puesto la piel de gallina a peñistas y no peñistas. Los cristales de la calle Mayor han temblado. Las fiestas de la Virgen de la Antigua se han terminado y todo Guadalajara se ha enterado.

Despedimos las Ferias y Fiestas de Guadalajara... y les ponemos nota. Porque los peñistas son de una raza diferente e incluso cuando se les acaba la juerga se lo toman con buen humor, solo podíamos acompañarles.

En cuanto a la traca, la secuencia de fuertes explosiones confirman que estas detonaciones, como dice la tradición China, son muy útiles para alejar las malas energías. En estos festejos este ritual ha dado sus frutos en unas fiestas en las que la armonía, la solidaridad y la hermandad han triunfado. El bien se ha impuesto al mal.