Sigüenza vivió la celebración religiosa por San Roque
En la mañana del domingo tuvo lugar la celebración religiosa correspondiente a la onomástica de San Roque.
Patrono de Sigüenza, santo antipandemias, abogado frente a pestes y otros males, la ciudad le ha pedido esta mañana particularmente por el final del coronavirus en un día de San Roque bien diferente al de otros años.
Sigüenza tiene una calle dedicada a él por el obispo Juan Díaz de la Guerra, además de una ermita, que después de la Guerra Civil paso a ser de titularidad municipal.
Actualmente, la imagen del santo se conserva en la Iglesia de las Ursulinas, donde habitualmente se celebra la misa en honor al santo, como también ha ocurrido hoy.
En una sencilla ceremonia, oficiada por el párroco de las Ursulinas, Jesús Montejano, sin procesión, ni tampoco el habitual acompañamiento musical de la Rondalla de Sigüenza, la celebración ha cumplido estrictamente con los protocolos antiCOVID19, en cuanto a distancia de seguridad, aforo, y uso de mascarilla.
A la celebración acudía la corporación municipal en pleno, encabezada por la alcaldesa de Sigüenza, María Jesús Merino. La regidora recordaba esta mañana que el patrón de Sigüenza, San Roque peregrino, dio su vida cuidando de los enfermos y apestados.
La alcaldesa también estuvo presente ayer en la misa celebrada en honor a la Virgen de la Asunción, en aquel caso en la Catedral de Sigüenza. Fue Atilano Rodríguez, obispo de la diócesis de Sigüenza-Guadalajara, que precisamente el 15 de agosto cumplía las bodas de oro de su sacerdocio, quien ofició la ceremonia. Merino felicitó personalmente al obispo por la efeméride, y especialmente por su labor, desde 2011, al frente de la diócesis de Sigüenza-Guadalajara y por los proyectos que en este tiempo han salido adelante, fruto de la colaboración entre instituciones.