Los detenidos utilizaban siempre el mismo modus operandi: hacían pedidos de comida a domicilio a diferentes establecimientos, en concreto a pizzerías. A continuación, esperaban a los repartidores en la calle y, una vez que llegaban al lugar para efectuar la entrega, les amenazaban con un arma blanca y se llevaban el pedido sin abonar el importe.

Utilizaron esta artimaña hasta en cuatro ocasiones, todas ellas en días diferentes, con la que llegaron a sustraer 300 euros en comida. Los investigadores de la Policía Nacional recopilaron todos los datos y características de los autores que pudieron aportar las víctimas, llegando finalmente a identificar a los presuntos autores de los hechos.

Ambos jóvenes fueron detenidos y puestos a disposición de la autoridad judicial, donde tendrán que responder por los cuatro robos cometidos.

Consejos a la ciudadanía

Desde la Policía Nacional, se recuerda a los ciudadanos que si son víctimas o testigos de hechos similares, eviten enfrentarse a los autores, y más si éstos van armados.

Intente memorizar la mayor cantidad de datos posibles como el aspecto físico, acento, vestimenta o dirección de huida para poder aportarlos a la Policía Nacional, ya que serán fundamentales para la investigación.

Ante una situación de emergencia, llame inmediatamente a la Policía Nacional al teléfono 091 .