El municipio de Brihuega, conocido como “la Provenza Española”, ha destacado por su modelo de desarrollo basado en la recuperación del patrimonio y el cultivo de plantas aromáticas como la lavanda. Este enfoque ha convertido a Brihuega en un destino turístico internacional y un referente contra la despoblación, generando un impacto económico significativo en la provincia de Guadalajara.

La administración local ha expresado preocupación sobre los riesgos que supondría la planta de biogás, incluyendo la contaminación del medio ambiente, el posible atraque de macrogranjas, la emisión de olores desagradables, la extracción de agua de los acuíferos locales, y la afectación a la calidad de vida de los residentes. Además, han señalado los posibles daños a la flora y fauna de la región, así como el impacto negativo en el turismo rural sostenible y el paisaje protegido del Valle del Río Ungría.

El Ayuntamiento de Brihuega y los municipios colindantes han acordado manifestar su oposición al proyecto y comunicarán su postura a todas las administraciones competentes a nivel provincial, regional y nacional, así como a la empresa promotora del proyecto y al ayuntamiento de Romancos.