Año tras año, el Belén Viviente de Galápagos sigue batiendo récord de asistecia. Esta ha sido la decimocuarta edición, y ha sido un rotundo éxito. Más de 2.500 personas, entre niños y mayores, han podido disfrutar de una puesta en escena en la que se implica buena parte del pueblo. Una celebración que tiene desde 2014 el reconocimiento de Interés Turístico Provincial.

La asociación cultural «Belén Viviente de Galápagos» es la encargada de llevar a cabo la representación, que se desarrolla a lo largo del casco antiguo de Galápagos, en patios privados, en la calle y en diversas estancias del bello palacio barroco de principios del siglo XVIII. Entre las escenas se intenta evocar la Anunciación de Dios al Ángel, la Anunciación del Ángel a María, la visita de María a Isabel, la llegada de José y María a la posada de Belén, la Anunciación a los pastores o la llegada de los Reyes Magos al Castillo de Herodes y la Adoración al Niño Jesús, entre otras escenificaciones. Una completa representación de 1 hora de duración aproximadamente, y que tuvo que realizarse unas 35 veces para que todo el público asistente pudiera verlo.

Son más de 150 personas de todas las edades entre actores, técnicos de sonido, montadores, y un largo etcétera de voluntarios que velan porque cada edición supere la anterior y la ilusión de una nueva representación inunde al pueblo con los preparativos.

Una iniciativa que cada año se intenta mejorar con la incorporación de algunas novedades, nuevas escenas, cambios de guiones y decorados, pero siempre respetando el sentido religioso de lo que significó el nacimiento de Jesús y aquellos días previos al acontecimiento que marcaría para siempre la historia.

Durante toda la tarde, los asistentes también pudieron degustar un caldito o un chocolate caliente, en un local aclimatado y habilitado para que la espera sea más llevadera, y donde se montó un mercado de artesanía y dulces caseros.

El evento estuvo en todo momento asistido por un gran despliegue de Protección Civil, coordinado por la agrupación local, y con la colaboración de agrupaciones de distintos municipios de la provincia, controlando en todo momento la entrada y salida de vehículos y velando por la seguridad de todos los asistentes.

“Queremos dar las gracias a todos los asistentes a la representación, así como a los que, de una forma u otra, nos han transmitido sus felicitaciones por la misma”, apostillan desde la asociación. “Nos ponemos a trabajar desde este momento en la XV edición del Belén Viviente de Galápagos 2020, para la que tenemos preparada grandes novedades que sin duda sorprenderán a todos los asistentes”.