Los cazadores se reivindican en el control de daños a la agricultura
Las sociedades federadas de cazadores de la región vienen jugando un papel fundamental en el control de daños a la agricultura en muchas zonas de Castilla-La Mancha, donde han logrado limitar y reducir mucho este problema.
Así se puso de manifiesto en una reciente reunión que tuvo lugar en Daimiel (Ciudad Real), en la que se dieron cita casi una veintena de sociedades de cazadores titulares de cotos de las provincias de Ciudad Real y Toledo afectados por la superpoblación del conejo.
En esta reunión, según ha dado a conocer la Federación de Caza de Castilla-La Mancha en un comunicado, se trató la problemática de los daños a la agricultura provocados por el conejo en estas provincias.
Durante el encuentro, quedó patente la trascendental función social que realizan las sociedades de cazadores en el control de daños a la agricultura, al tiempo que se puso de manifiesto que los cazadores no son el problema, sino que son la solución a esta situación.
Además, las sociedades de cazadores coincidieron en destacar que desde hace tiempo vienen realizando de forma callada pero constante, un importante trabajo para paliar los daños a la agricultura, que no está siendo reconocido socialmente.
El buen hacer y el buen entendimiento entre cazadores, agricultores y la propia administración, está dando sus frutos, hasta el punto que en muchas zonas en los que se registraba sobrepoblación de conejo, el problema se ha limitado y reducido.
Por otro lado, han querido destacar que los cazadores, en todo este tiempo, vienen haciendo de forma eficaz a su costa y sin coste para el erario público este trabajo, hasta tal punto, “que han convertido una afición, en una obligación”.
Desde la Federación de Caza de Castilla-La Mancha, han recordado que se está trabajando para que la implicación de todos los afectados sea aún mayor.
Y han señalado que para alcanzar mayores objetivos es necesario que la Administración regional agilice la tramitación de permisos, impulse la declaración de comarca de emergencia cinegética, elimine el límite de tenencia de hurones y amplíe las ayudas para la adquisición de malla conejera y protectores, tal y como promueve esta entidad.
Finalmente, la Federación de Caza de Castilla-La Mancha ha exigido que las administraciones titulares de infraestructuras públicas como ADIF, Fomento o la propia Junta de Comunidades sean corresponsables de esta situación.
Según el último el estudio de ‘Estimación de aprovechamientos cinegéticos en España por especies y comunidades autónomas de caza menor y caza mayor’, coordinado por José Luis Garrido, en Castilla-La Mancha entre las temporadas cinegéticas 2000-2001 y 2009-2010 se estiman que se capturaron algo más de 16,2 millones de conejos.
Este estudio revelaba que desde la temporada cinegética 2000-2001 la población de conejo en Castilla-La Mancha habría experimentado una importante recuperación, hasta el punto que se pasó de abatir 980.000 conejos en la temporada 2000-2001, a los casi 4 millones que se capturaron en la temporada cinegética 2009- 2010.