Kongsilla
¿Y si Kong hubiera sido otra reinterpretación, la cuarta al menos, de la historia del mono gigante y la niña rubita? Mal, ¿verdad? Quizás por eso esta nueva versión está protagonizada por una fotógrafa de guerra, un tipo duro (hay cosas que no cambian) y ofrece una mezcla de Gozdilla con detalles de Apocalypse Now y un poquito de Moby Dick.
KONG: LA ISLA DE LA CALAVERA
Director: Jordan Vogt-Roberts
Reparto: M Tom Hiddleston, Brie Larson, Samuel L. Jackson, John C. Reilly, John Goodman, Corey Hawkins.
Guión: Dan Gilroy, Max Borenstein, Derek Connolly (Historia: John Gatins)
País: Estados Unidos (2017).
Veamos. Tras un prólogo innecesario, Kong arranca cuando un ¿científico? logra que el Gobierno le dé escolta militar para viajar a la recién descubierta Isla de la Calavera. Además de los soldados, le acompañan la susodicha fotógrafa y el recio héroe de buen corazón y fríos modales. Juntos viajan a la isla, donde encontrarán un pequeño y simpático chimpacé (vale, esto último es mentira).
No vamos a engañarnos. El fuerte de Kong no está en su historia. Tampoco el original era brillante en su dibujo de personajes. La película de Cooper y Schoedsack era, sobre todo, sugerente por sus imágenes. Y como si de un reverso tenebroso del remake perpetrado por Peter Jackson en 2005 se tratara, Vogt-Roberts ha creado una obra oscura y por momentos terrorífica, como sin duda debió serlo en su momento el King Kong primigenio.
Cada generación tiene sus iconos. A un servidor, por ejemplo, se le quedaron grabadas en la memoria películas como El chico de oro, Una pandilla alucinante, Golpe en la pequeña China o Razas de noche, producciones menores casi olvidadas, aunque tengan un encanto indudable. El cine de género va renovando sus referentes y son pocos los que están llamados a perdurar. En ese sentido, Kong quedará grabado en la retina de más de un adolescente, pero es sólo otra versión con fecha de caducidad al dorso.
Fresca y potente- incluso muy potente- en el aspecto visual, se trata de una propuesta apropiada para los amantes de las películas de monstruos gigantes y entretenimiento vacío: una gran muestra de cine de acción y fantástico sin pretensiones, que no es poco.
LO MEJOR
Su innegable fuerza visual. El montaje. Los ataques de los distintos bichos que pueblan la isla. El encuentro entre Kong y los helicópteros.
LO PEOR
Los personajes protagonistas, anodinos en comparación con los secundarios. Un tercio final que pierde frescura respecto a todo lo anterior.