El Hospital Universitario de Guadalajara, dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM), se suma al objetivo de concienciar a la sociedad sobre la importancia de cuidar la salud renal y prevenir la Enfermedad Renal Crónica (ERC) con motivo de la celebración este jueves del Día Mundial del Riñón.

La celebración reflexiona este año sobre una doble preocupación: por un lado, el aumento de la enfermedad, que afecta a una parte cada vez más importante de la población, y por otro lado el impacto de la pandemia en pacientes renales, que presentan tasas de contagio y mortalidad superiores a la media de la población.

Si bien este año, debido a la pandemia, no podrán instalarse las habituales mesas informativas en el Hospital, desde el servicio de Nefrología de Guadalajara se sigue insistiendo en la necesidad de cuidar los riñones para evitar una enfermedad que sigue aumentando cada año y cuyos pacientes, además, se han visto especialmente afectados por el impacto de la Covid-19.

‘Viviendo bien con enfermedad renal’ es el lema de la campaña de la Sociedad Española de Nefrología (SEN), que ha realizado un vídeo con la colaboración de pacientes y celebridades del mundo cultural, deportivo y político como Pablo Milanés, Miguel Ángel Revilla, Lourdes Mohedado o Martín Berasategui, para lanzar un mensaje de prevención y promoción de la salud renal.

El jefe de Nefrología del Hospital de Guadalajara, el doctor Gabriel de Arriba, destaca que la enfermedad renal afecta en España a unos siete millones de personas y ocasiona una importante merma en su calidad de vida y en su expectativa de supervivencia. En nuestro país, más de 64.000 personas precisan actualmente diálisis o trasplante para reemplazar la función de sus riñones, una cifra que ha ido aumentando en los últimos años.

En la provincia de Guadalajara hay a día de hoy 99 pacientes en hemodiálisis, 21 en diálisis peritoneal y 140 pacientes con trasplante renal.

Estas cifras podrían ser mucho mayores teniendo en cuenta la dificultad de identificar síntomas en los estadios iniciales de la enfermedad, por lo que tiene a estar infradiagnosticada.

Su aumento se relaciona con factores de riesgo como la diabetes y la enfermedad cardiovascular, que serían la causa de la mitad de los casos. Otros factores son la obesidad, la hipertensión arterial o el tabaquismo. Uno de los mensajes a destacar en este día es que la enfermedad renal puede prevenirse en muchos casos adoptando hábitos de vida saludables que permitirían frenar su avance: no fumar, mantener una dieta sana, limitar el consumo de sal, controlar la tensión arterial y el colesterol y practicar ejercicio.

Con todo, se lanza un mensaje positivo y de estímulo a los pacientes y se destaca su protagonismo a la hora de manejar los síntomas, la adherencia a los tratamientos y al mantenimiento de hábitos de vida saludables y una vida lo más activa posible.

Mayor riesgo ante el Covid-19

Los pacientes con enfermedad renal crónica o sometidos a tratamiento con diálisis (tanto hemodiálisis como en diálisis peritoneal) o trasplante renal presentan mayor riesgo de infección por Covid-19 y en ellos la enfermedad es más grave.

“Esto nos ha obligado a todos los miembros de Nefrología, tanto médicos como enfermeras, auxiliares, celadores y personal administrativo, a adaptarnos a una situación difícil organizando la hemodiálisis en salas especiales y a tratar de modo muy personalizado a los pacientes trasplantados”, explica el doctor De Arriba. A pesar de la pandemia, el programa de trasplante ha continuado y durante el año 2020 recibieron un trasplante renal diez nuevos pacientes.

Mejoras en Guadalajara

El Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM) ha llevado a cabo acciones que van a suponer a corto plazo una notable mejora en la asistencia a los pacientes renales: por un lado, el traslado de las unidades de hemodiálisis y diálisis peritoneal a unas nuevas instalaciones en la zona de ampliación del hospital, con mayor número de puestos y mayor confort.

Por otro, destaca Gabriel de Arriba, destaca la apertura del nuevo centro concertado de hemodiálisis que se suma a los puestos de tratamiento que existen actualmente en el hospital y que permitirá evitar desplazamientos a algunos pacientes de Guadalajara que actualmente reciben sus tratamientos en Madrid.