Coincidiendo con el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, este domingo, 3 de diciembre, el Ayuntamiento de Azuqueca de Henares va a realizar una plantación en la avenida de la Industria. Está previsto que se coloquen en la zona un total de 40 árboles, en concreto, 32 melias, 5 moreras y 3 cedros. La actividad, que dará comienzo a las 11 horas, asignará un árbol a cada persona de ADA y Caminando que reside en Azuqueca. Serán ellos mismos quienes planten sus árboles.

"Se trata de un gesto simbólico con el que representamos el compromiso de este equipo de gobierno con una Azuqueca inclusiva en la que todas las personas, con independencia de sus capacidades, suman y ayudan a construir una mejor ciudad", afirma el alcalde, José Luis Blanco. "Al igual de los árboles, ese compromiso debe echar raíces profundas para poder crecer con fuerza", añade.

Tras esta iniciativa, se colocarán otros 100 árboles del programa 'En Azuqueca, nace un bebé, nace un árbol', que retoma su actividad tras comenzar la nueva época de plantaciones. Se van a plantar en la avenida de la Industria otros 100 árboles -28 pinos, 27 almeces, 27 cipreses, 12 melias y 6 cedros- por los últimos bebés empadronados en el municipio. La actividad comenzará a las 11:30 horas y el Ayuntamiento ha invitado a las familias. En todos los casos, se entregará un 'título de enraizamiento'.

Datos de la primera temporada

El proyecto se puso en marcha el pasado mes de enero con una primera edición, que se prolongó hasta mayo y se saldó con siete convocatorias y 751 nuevos árboles en la ciudad. En concreto, se actuó en el Camino de la Barca (50 ejemplares), la avenida Clara Campoamor (129), el parque de El Norte (100), la avenida Federico García Lorca (119), la avenida de Los Escritores (153), en el entorno de la plaza José Luis Viejo (100) y en el parque de La Quebradilla (100).

El proyecto 'En Azuqueca, nace una bebé, nace un árbol' tiene un doble objetivo: "por un lado, aumentar el número de árboles de la localidad, como medida de descarbonización para un aire más limpio, y, por el otro, favorecer el sentido de pertenencia a la ciudadanía, pues se crea un vínculo único entre los niños y niñas y los árboles", recuerda José Luis Blanco.