Desde hace unos años, las tardes previas a las cenas de Nochebuena y Nochevieja se han convertido en toda una fiesta en Guadalajara, gracias a las cientos de personas que se concentran para disfrutar del vermú en bares y restaurantes. Una iniciativa que comenzó en la plaza de San Esteban, extendiéndose cada año más y más por la calle Mayor y demás vías aledañas.

Desde entonces, cuando se acerca la Navidad, cada establecimiento hostelero de la zona centro comienza a preparar su oferta: Barras en el exterior, escenarios, iluminación, sonido, dj’s, actuaciones en directo… hasta baños químicos. Todo lo que esté en su mano para llamar la atención al público y lograr los suculentos beneficios que dos tardes de masiva afluencia pueden dejar. Y la calle Mayor, llena como sólo se podía ver durante las Ferias y Fiestas.

Pero parece ser que este año la organización de eventos en torno a los vermús de Nochebuena y Nochevieja va a dar un paso más allá. Y es que se ha solicitado la instalación, por parte de iniciativas privadas, de carpas en lugares más alejados del centro como la Plaza de Toros o el entorno del Ferial Plaza. Nuevas opciones, cada vez más ambiciosas, para lograr que la gente opte por una oferta o por otra.