Galápagos celebró este fin de semana un aniversario que explica, por sí solo, la dimensión alcanzada por uno de sus grandes símbolos culturales del pueblo, Guadalajara y Castilla-La Mancha, en su calidad de Fiesta de Interés Turístico Regional.

El Belén Viviente de Galápagos conmemoró su XX aniversario con un acto institucional y emotivo que puso el foco en el trabajo colectivo, la continuidad del proyecto y su proyección más allá del ámbito local, consolidado ya como una referencia cultural y turística en el entorno de la Campiña Baja, provincia de Guadalajara, área metropolitana de la Comunidad de Madrid y Castilla-La Mancha.

El acto conmemorativo, celebrado en la tarde de ayer, sirvió para reconocer la trayectoria de la Asociación Belén Viviente de Galápagos, responsable de una iniciativa que se ha convertido en el evento cultural más importante del municipio. La organización, la decoración y la puesta en escena marcaron una celebración en la que participaron activamente las personas que sostienen el proyecto desde hace dos décadas.

Entre las intervenciones institucionales, la diputada de Cultura de Guadalajara, Sabrina Escribano, subrayó la relevancia del Belén Viviente a nivel provincial y regional, mientras que el alcalde de Galápagos, Guillermo Rodríguez, agradeció públicamente la implicación de la Asociación y entregó una placa conmemorativa por estos veinte años de trayectoria. El presidente de la Asociación, Rubén Contera, realizó un balance del camino recorrido y puso en valor la colaboración de entidades públicas y patrocinadores que han hecho posible la continuidad del proyecto.

El acto tuvo también un marcado tono humano y emocional. Rosalía condujo la presentación, mientras que Conchi ofreció un repaso especialmente sentido por las distintas ediciones, recordando a quienes impulsaron el Belén en sus inicios, los jóvenes de la Peña El Despiporre. Poesía, proyecciones audiovisuales, una tarta de aniversario y una canción final precedieron al encuentro informal que cerró la jornada.

Más allá de la efeméride, el aniversario permite entender qué representa hoy el Belén Viviente de Galápagos. En su última edición completa, la número diecinueve, el municipio acogió una exitosa representación teatralizada con distintos pases y un recorrido guiado por un narrador, estructurado en 12 escenas bíblicas y de la vida cotidiana.

En ella participaron más de 200 personas, entre ellas 151 actores y actrices aficionados, implicando a buena parte del pueblo.

Declarado en 2022 Fiesta de Interés Turístico Regional, el Belén articula un itinerario que incluye escenas como el pregón, la anunciación a María, los sueños de José, el palacio de Herodes, el mercado, la posada o la adoración al Niño. Todo ello, en un entorno cuidado al detalle y sostenido por el esfuerzo voluntario, incluso en condiciones de frío intenso, sin que decaiga la dedicación ni la respuesta del público.

La experiencia se completa con la oferta de dulces artesanales, caldo, chocolate y churros, y con un dispositivo de seguridad y apoyo en el que colaboran voluntarios de Protección Civil de varios municipios de la provincia. Desde el Ayuntamiento se ha reiterado en distintas ocasiones el reconocimiento a todas las personas que hacen posible el desarrollo del evento y su crecimiento continuo.

A veinte años de su nacimiento, el Belén Viviente de Galápagos no es solo una tradición local. Es un ejemplo de participación vecinal, de cultura compartida y de capacidad para atraer visitantes.

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