Cáritas Regional pone en valor a sus más de 6.000 voluntarios durante el balance del 2017
Desde Cáritas Regional de Castilla-La Mancha insisten, que ·el compromiso es un modo de ser, de relacionarnos con nosotros mismos, con los demás y con el mundo. La solidaridad no es un sentimiento de vaga compasión hacia los males de tantas personas cercanas y lejanas; al contrario, es de la determinación firme y perseverante de empeñarnos por el bien común, es decir, por el bien de todos y cada uno, porque todos somos verdaderamente responsables de todos·, como dice S. Juan Pablo II en Sollicitudo rei sociales.
La Memoria 2017 de Cáritas Regional de Castilla-La Mancha refleja el compromiso de lucha contra la pobreza y la desigualdad que se desarrolla a través de las cinco Cáritas Diocesanas de nuestra Región (C.D. de Albacete, C.D. de Ciudad Real, C.D. de Cuenca, C.D. de Sigüenza-Guadalajara y C.D. de Toledo) y con el apoyo de una gran base social: voluntarios, socios, colaboradores, benefactores, contratados, etc.
En la presentación de la Memoria de Cáritas Regional Castilla-La Mancha han intervenido Don Atilano Rodríguez Martínez, Obispo de Sigüenza Guadalajara y a su vez, Obispo acompañante de esta Cáritas Regional, Fernando Muñoz, Presidente de Cáritas Regional, y Amador Casquero, Coordinador Regional.
D. Atilano ha explicado que “Tu compromiso mejora el mundo” está siendo el lema que a nivel de la confederación Cáritas, y por tanto de “nuestra Provincia Eclesiástica, impregna todas las acciones de Cáritas, y a todos los agentes que las llevan a cabo”.
Según don Atilano “hablar hoy de compromiso no está de moda. Suena a trasnochado, a poco actual. Está asociado al para siempre en un mundo que casi todo es para un rato. Hablar hoy de compromiso, es ir a contracorriente”. Por este motivo “Cáritas quiere hablar de comprometernos desde un modo de ser, de relacionarnos con nosotros mismos, con los demás y con el mundo. La solidaridad no es un sentimiento de vaga compasión hacia los males de tantas personas cercanas y lejanas; al contrario, es la determinación firme y perseverante de empeñarse en el bien común, es decir, por el bien de todos y cada uno, porque todos somos verdaderamente responsables de todos”.
Fernando Muñoz, presidente de Cáritas Regional, confirma como los agentes de Cáritas han sostenido la acción de esta Institución en 2017 en cada uno de sus programas, con 6.042 voluntarios, 2.353 socios y 394 personas contratadas. “Agentes que se han comprometido para dignificar la vida de las 37.885 personas que se han atendido en cada una de los puntos de Acogida de nuestra Región, llegando a ser beneficiadas 72.029 personas”, ha señalado.
Los recursos económicos invertidos para poder llevar a cabo cada uno de los programas que han dignificado la vida de las personas mencionadas anteriormente, durante 2017 han ascendido a 17.388.407,09 €.
Ha señalado como el tanto por ciento de recursos propios y privados (59,5%) es superior al de los recursos públicos, siendo este un 40,5%
Muñoz ha explicado como el número de personas atendidas es muy similar al de 2016, pero sin embargo los recursos económicos invertidos han sido algo superiores en 2017 (42.430,5 € más) ya que aunque el número de personas atendidas se ha estabilizado en los últimos años, la intensidad de la pobreza y sus efectos, así como el tiempo que lleva incidiendo en estas personas ha aumentado. Las personas que no han logrado coger “el tren de la recuperación económica” se han quedado anclados en la pobreza. En este sentido ha recalcado que “la recuperación económica no ha llegado a los más pobres aún”.
En cuanto a las necesidades que demandan estas son muy diversas, desde ayudas económicas, ayudas en especie (alimentos, ropa, calzado, enseres del hogar), farmacia y temas de salud, alquiler, transporte, libros y material escolar, aseo e higiene y alojamiento.
Refiriéndose al perfil de las personas que se han acercado a Cáritas, Fernando Muñoz, ha destacado que el perfil principal de personas con las que se ha trabajado desde Cáritas, han sido personas muy olvidadas y empobrecidas, familias con pocos o ningún recurso, personas que viven en hogares donde no entra ningún salario por empleo en alguno de sus miembros, Trabajadores pobres, jóvenes y menores de familias empobrecidas y excluidas, personas drogodependientes, enfermos crónicos, personas sin hogar, temporeros, inmigrantes, personas mayores, mujeres, etc. En definitiva, personas muy empobrecidas, con historias de vida muy rotas, con las que nos encontramos y caminamos juntos.
El presidente de Cáritas Regional ha dado las gracias a todas las personas que hacen posible, desde su compromiso, que los más empobrecidos puedan tener una mejor calidad de vida, luchan porque los derechos de los mismos sean reconocidos. Reitera el agradecimiento por tanto a voluntarios, socios, donantes, empresas, instituciones, administraciones, que hacen posible que desde Cáritas podamos seguir ayudando a tantas personas, poder hacer juntos Comunidad.