El Servicio de Anestesiología, Reanimación y Terapéutica del Dolor del Hospital Universitario de Guadalajara, dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM), ha llevado a cabo una sesión dirigida a profesionales de hospitales de Albacete y Toledo con el fin de dar a conocer su experiencia y resultados en el proceso de implementación de la Vía Clínica de Recuperación Intensificada en Cirugía Abdominal (Vía RICA) aplicada a la cirugía colorrectal y favorecer su desarrollo en el resto de hospitales públicos de la región.

Miembros de la Dirección Médica, cirujanos, anestesistas y enfermeros de los tres centros asistieron al encuentro, durante el cual se presentó el desarrollo, los resultados en su primer año y los programas o protocolos vinculados a la Vía RICA (fundamentalmente prehabilitación y optimización nutricional y de la anemia preoperatoria).

El jefe del servicio de Anestesiología, Reanimación y Terapéutica del Dolor del Hospital de Guadalajara, José Ramón Rodríguez Fraile, subrayaba el carácter multidisciplinar de un trabajo que implica, junto a los anestesistas, a la Enfermería y a los servicios de Cirugía, Endocrinología, Hematología, Rehabilitación, Farmacia y Admisión, además de Análisis Clínicos e Informática.

El Hospital de Guadalajara, añade el doctor Rodríguez Fraile, trabaja desde el año 2014 en esta línea, y su publicación por parte del Ministerio de Sanidad a finales de 2015 vino a ser “un espaldarazo, una señal de que estábamos haciendo bien nuestro trabajo”.

El protocolo consiste en el establecimiento de 20 objetivos clínicos asistenciales aplicados a la cirugía de colon que persiguen la mejora respecto a la calidad y satisfacción del paciente, reducir las posibles complicaciones y tiempo de estancia hospitalaria y favorecer su reincorporación temprana a la vida ordinaria.

El trabajo, liderado por la anestesista Mercedes Cabellos y la cirujana María Labalde, ha permitido compartir la experiencia con otros centros a nivel práctico y asistencial, las dificultades que entraña o las herramientas comunes a emplear. A través de la difusión de este protocolo se pretende facilitar a los profesionales las recomendaciones basadas en el conocimiento y la evidencia científica que permitan favorecer la recuperación temprana de los pacientes que se han sometido a este tipo de procesos quirúrgicos, mejorando su seguridad y optimizando la utilización de recursos.

Por otra parte, el Hospital está ya trabajando en la aplicación de la Vía RICA en cirugía bariátrica y se está estudiando su implementación en otros procesos de cirugía abdominal, fundamentalmente urológicos y ginecológicos.

Preparación e implicación

La Vía RICA es un instrumento dirigido a estructurar las actuaciones ante situaciones clínicas que presentan una evolución predecible. Consiste en aplicar una serie de medidas y estrategias perioperatorias dirigidas a pacientes que van a ser sometidos a una cirugía con el fin de disminuir el estrés segundario que causa la intervención quirúrgica y así lograr una mejor recuperación y una disminución de las complicaciones y la mortalidad.

Se lleva a cabo desde el momento del diagnóstico para conocer las necesidades del paciente con el fin de prevenir complicaciones y optimizar su tratamiento antes, durante y después de la intervención. Ello permitiría una recuperación más rápida de de la cirugía y la convalecencia postoperatoria, reduciendo el estrés físico y psicológico.

Para ello resulta fundamental la preparación previa del paciente, asegurando que éste se encuentre en las mejores condiciones e identificando los riesgos individuales en el preoperatorio.

El éxito de este programa requiere de la estrecha colaboración de todos los especialistas que participan en el proceso, así como la implicación de los propios pacientes y de sus familiares.