ALTO Y CLARO
Animadísimo festival de presentación del proyecto colectivo «Cabanillas se Escucha: Música como punto de encuentro», en el que participan media docena de bandas locales.
La Plaza del Pueblo acogió en la tarde-noche del sábado 17 de junio el evento de presentación del proyecto «Cabanillas se Escucha». Se trata de una iniciativa impulsada por el Ayuntamiento de Cabanillas del Campo y su Centro Joven Municipal, para dar a conocer la riquísima escena musical que se vive en la localidad en estos momentos, con gran proliferación de bandas y músicos de muy diferentes estilos. En esta iniciativa han participado a lo largo de los últimos seis meses media docena de grupos (los que atendieron a un llamamiento lanzado desde la Concejalía de Juventud) que han grabado en un estudio profesional de Guadalajara una recopilación de temas, todos ellos de creación propia, con los que el Ayuntamiento les ha editado un CD que se presentaba en público en el evento de este sábado.
El acto consistió en la presentación y reparto del nuevo disco, la proyección de un documental sobre el proyecto, y una actuación en directo de cinco de los seis grupos participantes en la iniciativa: “The Pupas”, “Low Crush”, “Serán cenizas”, “We are Tragedy” y “Lagartos sin sombrero”. No pudieron actuar finalmente “The Killer Sisters”, por problemas de última hora.
El festival comenzó con una presentación de la iniciativa a cargo de dos de los músicos locales que han participado más activamente en el proyecto. Así, explicaron que los grupos participantes tienen en común que ensayan de manera habitual en los espacios habilitados por el Ayuntamiento en los bajos del Centro Joven de Cabanillas, y que al menos el 50% de sus componentes están empadronados en el municipio. Los dos presentadores agradecieron al Ayuntamiento su iniciativa cultural, y destacaron cómo la habilitación y cesión gratuita de espacios para ensayar es clave en el auge de grupos en el municipio.
Tras la presentación se pudo ver en una pantalla gigante el vídeo documental grabado para la ocasión; y una vez culminado este «prólogo» del evento, llegaba el carrusel de actuaciones, en un festival que se extendió desde las 9 de la noche hasta casi la 1 de la madrugada.
Abrieron el escenario «The Pupas», un cuarteto de «rockeros maduritos» y formación clásica (cantante solista, batería y dos guitarras-coros), que presentaban un par de temas propios, de rock clásico en español de cuidadas letras y sonido limpio, así como un par de versiones clásicas.
Luego fue el turno de «Low Crush», un trío de guitarra-bajo y batería, que ofrece un sonido oscuro, cercano al «trash metal», muy basado en el ritmo del bajo, y fundamentalmente instrumental.
A continuación llegó el turno de «Serán cenizas», un quinteto local muy asentado (y formado por cantante, dos guitarras, bajo y batería) cuyos temas son pura esencia del punk: ritmo frenético, letras comprometidas y antisistema, y sonido golpeante.
En cuarto lugar tocaron los «We are Tragedy», otra banda cabanillera, con bastantes años ya a las espaldas, y que es una magnífica representación del más puro «metalcore». Sonido difícil para no iniciados, estruendoso y con un cantante que explota la interpretación gutural propia del estilo: ciertamente eficaces en lo que hacen. La formación está compuesta también en quinteto clásico, con batería, dos guitarras, bajo y cantante.
Finalmente cerraba plaza el grupo «Lagartos sin sombrero», quizá el de rock más melódico de la noche, que aporta también ciertos toques «indies», para una banda que se presentaba con batería, bajista, guitarra y cantante-guitarrista, además de con un componente al teclado.
